
Como vimos anteriormente, las predicaciones de Jesús presentaban el Reino de Dios y en sus enseñanzas se concentraba en cómo vivir en el mismo. De esta manera veamos como el Señor nos enseña sobre el Reino por medio de parábolas.
Jesús Enseña por Parábolas Sobre el Reino
«Oíd, pues, vosotros la parábola del sembrador: Cuando alguno oye la palabra del reino y...» (Mt 13.18-19)
«Les refirió otra parábola, diciendo: El reino de los cielos es semejante a un hombre que sembró buena semilla en su campo; pero mientras dormían los hombres, vino su enemigo y sembró cizaña entre el trigo, y se fue.» (Mt 13.24-25)
«Otra parábola les refirió, diciendo: El reino de los cielos es semejante al grano de mostaza, que un hombre tomó y sembró en su campo» (Mt 13.31)
«Otra parábola les dijo: El reino de los cielos es semejante a la levadura que tomó una mujer, y escondió en tres medidas de harina, hasta que todo fue leudado.» (Mt 13.33)
«Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo, el cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por ello va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo.» (Mt 13.44)
«También el reino de los cielos es semejante a un mercader que busca buenas perlas» (Mt 13.45)
«Asimismo el reino de los cielos es semejante a una red, que echada en el mar, recoge de toda clase de peces» (Mt 13.47)
«Por lo cual el reino de los cielos es semejante a un rey que quiso hacer cuentas con sus siervos.» (Mt 18.23)
«Porque el reino de los cielos es semejante a un hombre, padre de familia, que salió por la mañana a contratar obreros para su viña.» (Mt 20.1)
«¿Cuál de los dos hizo la voluntad de su padre? Dijeron ellos: El primero. Jesús les dijo: De cierto os digo, que los publicanos y las rameras van delante de vosotros al reino de Dios.» (Mt 21.31)
«Por tanto os digo, que el reino de Dios será quitado de vosotros, y será dado a gente que produzca los frutos de él.» (Mt 21.43)
«El reino de los cielos es semejante a un rey que hizo fiesta de bodas a su hijo» (Mt 22.2)
«Entonces el reino de los cielos será semejante a diez vírgenes que tomando sus lámparas, salieron a recibir al esposo.» (Mt 25.1)
«Porque el reino de los cielos es como un hombre que yéndose lejos, llamó a sus siervos y les entregó sus bienes.» (Mt 25.14)
De esta manera Jesús enseñaba acerca del reino de Dios a todos, de forma sencilla, utilizando expresiones y actividades que todos conocían y podían comprender, desde los niños hasta los adultos sin estudios. La mayoría de las personas en ese entonces eran agricultores, pescadores o comerciantes. Así que Él usaba ejemplos relacionados a estas actividades y también utilizaba ejemplos de la vida diaria, de costumbres culturales de la época. Explicaba el Reino a todos.
El Sermón del Monte
También en los capítulos 5, 6 y 7 del Evangelio de Mateo, como en tantos otros pasajes mas, Jesús enseña sobre cómo vivir en el Reino de Dios. Por decirlo de alguna manera, las leyes del reino de Dios. El estilo de vida del reino.
El Apóstol Pablo Predica el Reino de Dios
De la misma manera los discípulos predicaban y enseñaban las mismas cosas que recibieron y aprendieron de Jesús. Tal el caso del apóstol Pablo como vemos a continuación.
«Y entrando Pablo en la sinagoga, habló con denuedo por espacio de tres meses, discutiendo y persuadiendo acerca del reino de Dios.» (Mt 19.8)
«Y habiéndole señalado un día, vinieron a él muchos a la posada, a los cuales les declaraba y les testificaba el reino de Dios desde la mañana hasta la tarde, persuadiéndoles acerca de Jesús, tanto por la ley de Moisés como por los profetas.» (Hch 28.23)
«Y Pablo permaneció dos años enteros en una casa alquilada, y recibía a todos los que a él venían, predicando el reino de Dios y enseñando acerca del Señor Jesucristo, abiertamente y sin impedimento.» (Hch 28.30-31)
Visto lo visto, cuál debería ser nuestra predicación y enseñanza?
«¡Cuán hermosos son sobre los montes los pies del que trae alegres nuevas, del que anuncia la paz, del que trae nuevas del bien, del que publica salvación, del que dice a Sion: ¡Tu Dios reina!» (Is 52.7)

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